El número cuatro de Superman llegó y con él también la cuarta parte de este primer arco argumental tras el Rebirth: El Hijo de Superman.
Después de habernos presentando al Erradicador, el cual en primera instancia parecía tener buenos motivos al visitar la Tierra, concluíamos el número anterior con este mismo personaje tratando de "limpiar" a Jon de su impureza humana.
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| Lois sufre los daños de la batalla en la Fortaleza |
Ahora su madre ha sufrido por su culpa (o es lo que él piensa) y Jon siente surgir en su interior el deseo de matar, justificándose en que en realidad él no es ni humano ni kryptoniano. Sin embargo, el amor de una madre no tiene límites y con palabras sencillas pero llenas de afecto logra calmar a su hijo, haciéndole ver que puede llegar a ser algo más grande que un humano o un kryptoniano pues tiene lo mejor de ambos mundos dentro de sí. En ese momento, Jon recapacita, se ajusta la ropa y colgándose por primera vez su capa va en apoyo de su padre como el auténtico hijo de Superman. (Un mini Superman prefiero decir yo).
El momento es épico e histórico. Es la primera vez que peleará lado a lado con su padre y su entrada no podría ser más triunfal: en perfecta sincronía, ambos "supers" logran conectar un doble impacto en el rostro del Erradicador.
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| Double Punch padre-hijo |
Este golpe provoca que las almas de los kryptonianos que se encontraban en el interior de la creación se liberen. El Erradicador explica que sirvió como refugio de estas almas tras la muerte de Krypton y tras decir esto todos desaparecen de la Fortaleza. ¿Qué es lo que ha sucedido? ¿Acaso han muerto? ¿Han sido absorbidos? La siguiente página lo revela.
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| Superman es atraído hacia Metropolis |
Por su parte, las almas kryptonianas se empiezan a "apoderar" de los cuerpos humanos alrededor y parece que intentan hacer lo mismo con Supes. Sin embargo, al alejar de este la roca con kryptonita, las cosas parecen mejorar pero es el padre del Gran Azul, el mismísimo Jonathan Kent quien en una especia de visión le recuerda a su hijo que tiene alguien por quien regresar y que él ya sólo puede descansar en paz... y esa es la verdadera libertad.
Las almas kryptonianas dentro de Superman parecen escuchar este mensaje y entienden que ellos también deben descansar y ser libres por fin. Sin embargo, el Erradicador no ha dicho su última palabra.
Para él, la única y verdadera libertad se puede encontrar en su interior y trata de regresar a los espíritus hacia él exclamando su reiterativa frase: "somos uno". El proceso comienza y ahora Superman se da cuenta que su prioridad es poner a salvo a salvo a su familia. Nos damos cuenta que al tener esposa e hijo las cosas cambian mucho si lo comparamos con él mismo años atrás o incluso con el mismo Superman Nuevos 52.
La cuenta regresiva para el regreso de las almas continúa y Jon desea hacer algo para ayudar a su padre. El Erradicador es demasiado rápido para él y Lois le dice a su esposo que ya no pueden correr, que debe enfrentar a la amenaza de frente, sin embargo Superman no está pensando sólo en su familia, piensa en la gente que está cerca y que seguramente resultaría dañada si continúa la batalla ahí. Ese es un verdadero héroe.
Las almas kryptonianas hablan con el Hombre del Mañana y desean darle tiempo para que pueda escapar del Erradicador. Ellos tienen su esperanza puesta en los hijos de Krypton y confían en que ellos llevarán el legado de su planeta a un lugar alto sin la necesidad de seguir los planes del "Super-Terminator", como alguien que contempla la escena lo denomina.
Gracias a la distracción que los espíritus generan, Superman tiene tiempo de pensar en algo: ve un sumergible, el cual en primera instancia podríamos pensar que lo usará para colocar en el a su familia y mandarlos al mar mientras se desarrolla el combate en la superficie, sin embargo nada más lejos de la realidad.
Alguien ve a Superman alejarse del lugar y le reclama sobre su huida. Pero hay quien siempre va a creer en Supes y le dice que él no está escapando sino que el Hombre de Acero de seguro tiene un plan. El número cierra con un cielo espectacular de fondo y Superman elevándose. ¿Qué planea hacer? ¿A dónde se dirige? Cualquiera debe imaginarlo: ¡Superman llevará la pelea a la luna!
Así concluye esta entrega en la que Superman muestra una vez más como antes de su propia reputación está el velar por el bien de los demás. ¿Vencerá en esta batalla? ¿Su plan resultará como él espera? Tenemos que esperar dos semanas para la conclusión de esta espectacular historia.
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| El Erradicador inicia el proceso para re-absorber las almas kryptonianas |
Para él, la única y verdadera libertad se puede encontrar en su interior y trata de regresar a los espíritus hacia él exclamando su reiterativa frase: "somos uno". El proceso comienza y ahora Superman se da cuenta que su prioridad es poner a salvo a salvo a su familia. Nos damos cuenta que al tener esposa e hijo las cosas cambian mucho si lo comparamos con él mismo años atrás o incluso con el mismo Superman Nuevos 52.
La cuenta regresiva para el regreso de las almas continúa y Jon desea hacer algo para ayudar a su padre. El Erradicador es demasiado rápido para él y Lois le dice a su esposo que ya no pueden correr, que debe enfrentar a la amenaza de frente, sin embargo Superman no está pensando sólo en su familia, piensa en la gente que está cerca y que seguramente resultaría dañada si continúa la batalla ahí. Ese es un verdadero héroe.
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| ¿Superman huyendo de la pelea? |
Las almas kryptonianas hablan con el Hombre del Mañana y desean darle tiempo para que pueda escapar del Erradicador. Ellos tienen su esperanza puesta en los hijos de Krypton y confían en que ellos llevarán el legado de su planeta a un lugar alto sin la necesidad de seguir los planes del "Super-Terminator", como alguien que contempla la escena lo denomina.
Gracias a la distracción que los espíritus generan, Superman tiene tiempo de pensar en algo: ve un sumergible, el cual en primera instancia podríamos pensar que lo usará para colocar en el a su familia y mandarlos al mar mientras se desarrolla el combate en la superficie, sin embargo nada más lejos de la realidad.
Alguien ve a Superman alejarse del lugar y le reclama sobre su huida. Pero hay quien siempre va a creer en Supes y le dice que él no está escapando sino que el Hombre de Acero de seguro tiene un plan. El número cierra con un cielo espectacular de fondo y Superman elevándose. ¿Qué planea hacer? ¿A dónde se dirige? Cualquiera debe imaginarlo: ¡Superman llevará la pelea a la luna!
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| El siguiente round será en la luna |
Así concluye esta entrega en la que Superman muestra una vez más como antes de su propia reputación está el velar por el bien de los demás. ¿Vencerá en esta batalla? ¿Su plan resultará como él espera? Tenemos que esperar dos semanas para la conclusión de esta espectacular historia.
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